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Relevancia

La relevancia calcula la capacidad que tiene la marca para importar en la vida de las personas. Su capacidad para dar respuesta a las necesidades, motivaciones e insights de sus audiencias de la mejor forma posible. Para determinar el nivel de relevancia de una marca, es importante hacerse las siguientes preguntas:

  • ¿Nuestra propuesta de valor está centrada en nuestros clientes más que en aquello que vendemos?
  • ¿Tenemos un propósito de marca que pretende transformar la comunidad y el entorno que nos rodea para que el mundo sea un lugar mejor?
  • ¿Nuestra marca se posiciona frente a los principales problemas y retos sociales a los que se enfrenta la sociedad?
  • ¿Somos capaces de inspirar y generar conexión emocional?
  • ¿Contamos con mensajes de comunicación clave segmentados por audiencia?

¿Qué beneficios aporta la relevancia?

Que tu marca cuente con un buen nivel de relevancia contribuye a:

  • Inspirar y generar una conexión emocional y afectiva.
  • Mejorar la preferencia adecuando el producto o servicio a las necesidades de los públicos.
  • Garantizar un mensaje adecuado e interesante en cada etapa del viaje del consumidor.

¿Cómo mejorar la relevancia?

Para trabajar la relevancia es recomendable que lleves a cabo las siguientes acciones:

  1. Centrar la propuesta de valor en los clientes.

Tu marca debería estar basada en un insight de consumidor, es decir, en una verdad de consumo que sea clave en el interés que tus públicos muestran hacia tu marca. Encontrar un insight no es una tarea sencilla ni tampoco existe una sola manera de hacerlo, pero siempre parte del análisis de los públicos objetivo y de la competencia.

  1. Tomar posición frente a problemas y retos de la sociedad.

Las marcas tienen que tomar posición, no solo posicionamiento, ya que las personas valoran las marcas que tienen una trascendencia más allá de su actividad puramente comercial. No es cuestión de reivindicar todas las injusticias de la sociedad, sino de adoptar posturas que estén en línea con el propósito de tu empresa. Y no te vamos a engañar: cuando tomes posición, perderás algunos fans. No obstante, atraerás a otros y reforzarás aún más los lazos con los que compartes valores.

  1. Inspirar a los públicos y generar una conexión emocional.

Los productos con poca vinculación emocional son fácilmente reemplazables por otros. Por eso es importante crear lazos sólidos desde la marca que te ayuden a conectar con las personas. Te animamos a listar los beneficios de tu empresa incluyendo, además de los funcionales, aquellos que sean emocionales (los que satisfacen factores psicológicos) y simbólicos (los relativos al status y diferenciación social).

  1. Segmentar los mensajes según la audiencia.

No tiene sentido hablarle igual a todo el mundo. Por eso te recomendamos trabajar mediante una plantilla de customer journey, una metodología que te permitirá segmentar los mensajes según el público objetivo, el canal y momento del proceso de decisión de compra.

  1. Definir un propósito de marca.

Un buen producto o servicio ya no es suficiente para los nuevos consumidores que esperan que las marcas se impliquen en la sociedad. Por eso, se hace necesario trabajar un propósito, que hará que tu marca disponga de una plataforma adicional para generar engagement, diálogo, experiencias y emociones.

Y ahora que sabes a qué nos referimos cuando hablamos de relevancia, ¿quieres descubrir el siguiente parámetro clave para medir la fortaleza de marca? Te explicamos la diferenciación en el siguiente artículo.

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